Qué fácil pasan los años sin darnos cuenta. Cuando miramos hacia atrás comprendemos que son muchos los que han pasado desde salimos del colegio y partimos con rumbos diferentes por la vida. Para unos no ha sido nada fácil, para otros la vida los ha tratado con mucho cariño. Desagraciadamente algunos de los nuestros ya no nos acompañan en este camino dificil pero simpático que es la vida. En todo este largo camino de exalumnos maristas cuántos de nosotros no nos hemos visto para nada. En estos casi 30 años muchas veces en la mayoría de los casos ignoramos lo que le pasa a nuestro hermano condiscípulo. Qué habrá sido de su vida, decimos y ahí queda todo. Cuántas cosas podríamos hacer ahora nuevamente si estaríamos en contacto la mayoría. Uno de los objetivos que tiene este blog es contactar con aquel compañero que se "perdió de nuestra vista" y que podemos volver a verlo si lo queremos. Hay muchos de nosotros que viven todavía en la localidad, comenzar por ellos. De vez en cuando una llamada o un correo electrónico para saber de él es muy positivo. No esperar los funerales para reencontrarse con el amigo. Para los que están afuera, tienen la oportunidad de dejar por un momento a un lado el trabajo y comunicarse con nosotros. Estamos aquí todavía. La vida es una sola. Si tienes simpatía por tu amigo o lo estimas mucho...dícelo ahora. Ser hombre también es dejarse llevar por los sentimientos. El próximo año tenemos la oportunidad de demostrarnos que somos unidad, que la Promoción Pablo VI es diferente a las demás. Que solamente no estamos agrupados para la diversión. Ya hemos demostrado en muchas oportunidades que no somos así. Terminemos de conocernos como amigos y sepamos apreciarnos con nuestras virtudes y con nuestros defectos. Cuando nacemos, no elegimos el país donde nacer, los padres o hermanos, pero sí tenemos la facultad de elegir a nuestros amigos y cultivar esa inquebrantable amistad....
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